El pan es uno de los indispensables en la mesa. ¡Siempre lo queremos al lado! Por eso, los tradicionales viajes diarios a la panadería no se han perdido del todo, aunque el ritmo del día a día cada vez lo pone más complicado. Aunque queramos, hay menos tiempo para visitar hornos tradicionales. ¿El resultado? Terminamos optando por productos que, sin criticar en absoluto su sabor, están hechos de una forma más industrializada. Y seguro que has notado que con el paso de las horas van perdiendo su frescura. Así que es inevitable preguntarse cómo conservar el pan y manejar al dedillo los mejores trucos para conseguirlo.
¿Dónde guardar el pan en la cocina?
Para guardar el pan adecuadamente no hay que hacer grandes descubrimientos: la tradicional panera o una bolsa de tela de toda la vida son las mejores compañeras de viaje. Incluso las bolsas de papel que nos dan en las panaderías son una buena opción. Lo más importante, lo que siempre señalan los expertos en este alimento, es no dejarlo nunca al aire y jamás utilizar bolsas de plástico para conservarlo. El motivo es muy sencillo: este material, como buen impermeable, hace sudar al pan de corteza dura y acelera su degradación.
Por lo tanto, la primera conclusión ya la tenemos bien clara: el mejor recipiente para guardar el pan son las paneras que ya tenían nuestras abuelas en casa. Y si es de madera muchísimo mejor. ¿Das por hecho que va a sobrar? Entonces recurre al congelador.
¿Cómo conservar el pan de molde? ¿Y el de hamburguesa?
Al respecto del tema de la conservación en bolsas de plástico solo hay una excepción: los panes con la corteza blanda. Se elaboran con un proceso algo diferente a los demás, así que la humedad que se genera dentro del plástico les viene de perlas para mantenerse bien hidratados.
¿Cómo conservar el pan rallado?
Nos parece interesante hablar de uno de los grandes olvidados cuando se trata este tema. Los más expertos en la cocina seguro que no tienen dudas, pero más de un recién iniciado se preguntará cómo conservar el pan rallado desde el momento que se abre. Los botes herméticamente cerrados son la solución. Igual que en el caso anterior hay un favorito: los de cristal.
5 ideas para guardar el pan con éxito
- Una de las mejores ideas para guardar el pan y que lo aprecies con todo su sabor más días de los habitual no tiene que ver con su almacenamiento. Nos explicamos: disfrutarlo tierno es mucho más sencillo si elegimos pan hecho en panaderías tradicionales. En ellas se respeta mucho más el proceso de fermentación y los tiempos que necesita un pan de buena calidad. Los de supermercado, por norma general, se fermentan rápidamente, se congelan para su distribución y se terminan en hornos de aire forzado. Precisamente este último es el motivo por el que duran tan poco en condiciones óptimas.
- Por cierto, comprarlo en rebanadas ya cortadas tampoco es recomendable. De esta forma pierde su composición compacta y dura menos tiempo.
- Si tienes previsto que va a sobrar pan y no habrá más remedio que guardarlo, compra alguno con mucha miga. Son los que duran frescos más tiempo.
- Resuelto el enigma de dónde guardar el pan en la cocina mientras esté fresco, otro gran consejo es congelar el que no vayas a consumir al momento. Repetimos: congelar, no enfriar. No olvides que no se puede guardar el pan en la nevera, o al menos no se debe. En cambio, si lo congelas en rebanadas (ahora sí) o pedazos del tamaño que vayas a consumir, lo puedes tener listo respetando el proceso de descongelación adecuado (tres horas en la nevera y luego temperatura ambiente).
- La panera, una bolsa de tela, papel, el congelador… ya ves que conservar pan tampoco tiene grandes misterios. Pero, a pesar de estos consejos, es más que probable que en alguna ocasión se te ponga duro. Para estos casos todavía hay un recurso muy valioso: la tostadora. Mételo 1 minuto -sin que llegue a quemarse, por supuesto- y lo tendrás perfecto. Eso sí, hay que comerlo caliente.
Como colofón final a este auténtico curso de cuidar el pan te diremos que con la función vapor de los hornos Balay puedes regenerarlo o calentarlo para encontrarlo casi casi como recién hecho.
Y ahora sí: te hemos dicho que íbamos a charlar sobre los mejores consejos acerca de cómo conservar el pan y así ha sido. No obstante, si conoces alguno y no sale en la lista, nos los puedes dejar en los comentarios del artículo. ¿Ha llegado el momento de recuperar la tradicional panera?
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