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Mi frigorífico hace ruido, ¿qué hago?
Que un frigorífico haga ciertos ruidos entra dentro de lo normal. Es cierto que cada vez los fabricamos más silenciosos, pero no nos olvidemos que dentro tienen componentes (como el motor o el compresor) que, obviamente, algún sonido emiten. Hasta aquí todo correcto. El verdadero problema llega cuando esos ruidos se vuelven molestos en tu día a día, por ejemplo, en las casas con la cocina abierta al salón. ¿Se puede hacer algo para mitigarlo? Nosotros tenemos algunas ideas, que vas a descubrir si continúas leyendo este artículo.
Consejos para reducir el nivel de ruido que hace un frigorífico
Toma buena nota de nuestra primera recomendación: deberías tener muy claro qué ruidos de tu frigorífico son normales y cuáles indican un potencial problema. En el manual de instrucciones de todos nuestros modelos ya lo aclaramos, pero aprovechamos para subrayarlo aquí: el murmullo del motor, el gorgoteo del refrigerante o pequeños clics al encenderse y apagarse el compresor forman parte del funcionamiento habitual de prácticamente cualquier nevera. También los chasquidos del sistema NoFrost durante el desescarchado automático.
Ahora bien, si el ruido ha cambiado o se ha intensificado, vamos con dos puntos que puedes revisar tú mismo:
- Confirma que el frigorífico esté bien nivelado y no toque paredes o muebles, que las bandejas y botellas del interior no están chocando entre sí y que no haya acumulación de hielo en el congelador.
- Por otro lado, es esencial mantener limpias las bobinas del condensador y dejar unos centímetros de separación con la pared, ya que esto te ayuda a mejorar la ventilación y reducir vibraciones. Si tienes cualquier duda sobre limpieza o instalación, escribe un WhatsApp al 682 17 41 42 y tendrás al otro lado a uno de tus amigos de Balay.
Qué tener en cuenta a la hora de comprar un nuevo frigorífico
¿Te desespera el ruido que emite tu frigorífico actual? Entonces es posible que haya llegado el momento de cambiarlo. A nosotros, desde luego, nos parece una gran idea, sobre todo si entre los candidatos al cambio se encuentra cualquiera de nuestros frigoríficos Balay. Eso sí, para que tu compra sea un éxito rotundo tendrás que tener muy claros estos aspectos:
- El primero es el nivel de ruido, que se mide en decibelios (dB). En este sentido, si bien es cierto que un frigorífico silencioso suele estar por debajo de 40 dB, en Balay hemos dado un paso más: gracias a las tecnologías NoFrost de última generación y al compresor Inverter de alto rendimiento, alcanzamos niveles de tan solo 29 dB. Se acabó perder la paciencia por los ruidos.
- El segundo aspecto es la tecnología del motor. Los ya mencionados compresores Inverter tienen la ventaja de que ajustan la potencia de forma progresiva, evitando arranques bruscos y reduciendo tanto el ruido como el consumo energético.
- Y, por supuesto, antes de comprar un frigorífico (silencioso o no) revisa la etiqueta energética: además de sus índices de eficiencia, encontrarás en ella el dato exacto de decibelios. Ambos tienen una incidencia directa en el consumo final de luz. Haznos caso: querrás que sean lo más bajos posible.
Frigoríficos silenciosos para cocinas abiertas al salón
En lo relativo a los espacios abiertos, no hace falta convencerte de que el silencio cobra todavía más importancia. En Balay, además de la tecnología Full Skin Condenser —que coloca el condensador en los laterales, añadiendo un aislamiento de espuma— incorporamos sistemas que reducen el ruido de forma notable sin renunciar a la eficiencia. Así conseguimos frigoríficos aún más silenciosos que jamás volverán a interrumpir una conversación o estropearán tu serie favorita.
Otra opción fantástica que te planteamos es elegir un modelo integrable, cuya instalación dentro del mueble ayuda a amortiguar el sonido. A nivel estético, esta opción cada día tiene más admiradores porque logra un estilo muy limpio y coordinado de todo el diseño de la cocina.
¿Conocías los niveles de dB necesarios para considerar silencioso a un frigorífico? Sea cual sea la respuesta, desde hoy sí que lo sabes. Sin embargo, quizás pienses que en nuestro catálogo hay tantos modelos que te resulta difícil elegir. A lo que nosotros responderemos que la solución al problema es muy sencilla: contacta con Balay y hacemos juntos la búsqueda.
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