Desde que en 1947 Esteban Bayona y José María Lairla fundaran esta empresa, han ocurrido tantas cosas que darían para escribir un libro. Por eso, con la ayuda de Ricardo Giner, antiguo empleado de Balay, se ha presentado recientemente “Una historia sobre nuestra historia”. Este libro repasa casi 70 años de trabajo, esfuerzo y evolución. Grandes hitos y pequeños detalles que han llevado a Balay a convertirse en uno de los principales fabricantes de electrodomésticos de nuestro país.
De este laborioso trabajo de investigación hemos extraído las curiosidades que compartimos a continuación. Una recopilación de anécdotas que nos acercan todavía más a una marca de toda la vida.
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70.000 pesetas
Al cambio, 420,70 €. Es lo que necesitaron dos jóvenes emprendedores, Bayona y Lairla, para arreglar un local y empezar la producción de material eléctrico, en 1947. Al principio contaron con medios rudimentarios: compraron dos pequeñas prensas y utilizaron hasta tres viejas máquinas de coser adaptadas para bobinar el cobre.
Muy pronto esta inversión empezó a dar frutos: a finales de 1951 la plantilla estaba formada por 40 personas y se había alcanzado una producción de más de 70.000 unidades al año. Y pensar que todo empezó con 70.000 pesetas…
Remitente: Balay
“Lo más importante es cumplir con la palabra empeñada. Balay siempre escribe con remite” porque “para tener un futuro mañana, el hoy debe estar bien hecho”; esta filosofía de Esteban Bayona ha trascendido hasta la actualidad. Un espíritu empresarial de compromiso, responsabilidad y trabajo bien hecho, que forma parte del ADN de la compañía desde sus inicios.
La primera súper automática
Septiembre de 1966. Arranca la fabricación de lavadoras automáticas, marcando una de las fechas clave de la historia de Balay, y en la vida doméstica de miles de hogares. El modelo T-500 no tenía competencia en el mercado nacional, puesto que los principales fabricantes solo producían lavadoras semiautomáticas que no llegaban a realizar el ciclo completo; y las lavadoras de importación resultaban excesivamente caras. En pocos años, Balay llegó a ser uno de los mayores fabricantes de lavadoras automáticas de Europa y líder indiscutible en el mercado nacional.
Los trabajadores, siempre por delante
“No admitir la valía de los demás es manifestar la propia incompetencia”, afirmaba Esteban Bayona en 1972, durante la celebración del XXV aniversario de la marca. En 1975, Balay fue declarada Empresa Ejemplar por la Delegación Provincial de Sindicatos, y de nuevo, Bayona hizo constar que ese reconocimiento estaba dirigido a todos los que componen Balay.
Reconocer públicamente el trabajo de los empleados es, en esencia, lo que 40 años después hace Balay con su campaña “Gracias por elegirnos”. Como ya hemos dicho, el espíritu de los fundadores sigue estando muy presente en la forma de pensar, actuar y comunicar.
Como dato curioso, la fiesta con los trabajadores y sus familias que tuvo lugar en 1972, se ha repetido con éxito en años posteriores. Sin ir más lejos, hace apenas unas semanas los empleados se reunían en el Parque de Atracciones de Zaragoza, para pasarlo en grande con sus familiares. Y es que las buenas tradiciones no deben perderse:
Bienvenida a Balay, tecnología
A finales de los 80 se creó la División de Tecnología de Grupo, iniciando una fase de robotización con aparatos como el ASEA (para la soldadura de hornos). Como dato curioso, para mostrar su autonomía y flexibilidad, el robot se programó para saludar a las visitas escribiendo en una pizarra: “Bienvenido a Balay Sr…”; y a continuación, seguía con su tarea.
50 años sin verlos…
… y por fin salen a la luz. Algunos de los documentos, archivos y fotografías que se han publicado en el libro Una historia sobre nuestra historia, llevaban más de medio siglo ocultos. Gracias a este material se ha conseguido aportar una perspectiva única de lo que es hoy Balay. Trabajadores de Balay, familiares de los fundadores y antiguos empleados han colaborado con Ricardo Giner, en esta gran tarea de investigación y documentación sobre la historia de la marca.
Más de 15.000 personas…
… visitaron, conocieron y reconocieron la historia de Balay a lo largo de los seis meses de duración de la exposición “Érase un vez Balay”, una muestra restrospectiva sobre la historia de la empresa. Fue inaugurada en mayo de 2015 en la Cámara de Comercio de Zaragoza, y en ella no solo se mostraba la evolución de la marca, sino también la forma en la que estos avances han cambiado nuestras vidas. Echa un vistazo aquí al álbum de la exposición.
Estas pequeñas curiosidades que acabamos de contarte forman parte de una gran historia. Si quieres conocerla al completo te aconsejamos que leas el libro “Una historia sobre nuestra historia”, que podrás adquirir en la tienda solidaria Balay. Además, el dinero recaudado con las ventas irá destinado al proyecto ‘Escuela de segunda oportunidad’, de la Fundación Federico Ozanam.
Y por supuesto, si te animas a compartir o rememorar con nosotros algún detalle de esta gran historia, no lo dudes y déjanos tu comentario.
paqui dice
Hola Balay, me ha gustado leer las anecdotas de Balay, esos señores tuvieron que ser unos grandes jefe, podian aprender algunos, que suerte trabajar en una empresa asi, como ya en otras ocasiones habia leido cosas de Balay el año pasado cuando se me rompio la lavadora la cambie por una Balay.
un saludo a todos
Balay dice
Hola Paqui, gracias por tu comentario y por confiar en nosotros para sustituir tu lavadora. Puedes saber más sobre nuestros centros de trabajo aquí. Estaremos encantados de resolver todas las dudas que tengas con tu nueva lavadora 🙂 Estamos a tu disposición. Un saludo.
MARIA dice
Hola,
me siento muy orgullosa de la marca Balay, sobre todo de la persona de Don Alfredo Sarto Pina,que colaboro en la creación de esta gran empresa, que fue y es Balay.
Saludos.
Balay dice
Muchas gracias por tu comentario, María. En las primeras páginas del libro de la Historia de Balay, se menciona a Don Alfredo Sarto Pina. Estamos a tu disposición. Un saludo.